Sorpresa mayúscula del TP Mazembe. Victoria que marcará un punto de inflexión en la historia más reciente del fútbol, victoria para que todos aquellos que ven veían ridícula esta competición cambien de opinión, victoria que engrandece la figura de un fútbol alternativo al de los dos continentes dominadores en esto del fútbol, victoria que entierra por fin la idea de que esto al final era como la antigua Intercontinental pero con un entrenamiento previo, victoria para todos los románticos que hoy hemos saltado con los dos goles de los congoleños.
Un equipo de la azotada provincia de Katanga, en la RD Congo, por el que nadie apostaba ni tan siquiera para revalidar su título de la Champions africana, se ha metido en la final del Mundial de Clubes eliminando al campeón de la Copa Libertadores, el Inter de Porto Alegre, que ya contaba con un trofeo en sus vitrinas.
En el día de hoy estuvo fenomenal todo el partido de los congoleños. Podríamos criticar algunos aspectos tácticos, algunos otros individuales, algunos otros de cualquier tipo. Pero hoy no vamos a criticar nada de un equipo que ha hecho historia y que ha regalado ilusión a la población del África negra.
El entrenador N'Diaye avisó al inicio del torneo que venían a por todas, y nadie lo tomó en serio. Todos pensaron que caería frente a Pachuca en cuartos y la vida seguiría igual, pero hoy la vida no sigue igual. Hoy el fútbol africano es noticia en todo el mundo.
Voy a hablar poco del partido. Solo diré que estuvo genial el portero Kidiaba, un mito tras sus dos partidos en esta competición. Estuvo memorable Kabangu en el primer gol. Golazo. Y estuvo sublime Kaluyituka en el segundo tanto. Varias bicicletas y definición extraordinaria. Segundo golazo. Y me gustó mucho Singuluma, muy incisivo e intenso en todas sus jugadas.
Pero destacar solo a algunos jugadores sería injusto así que nombraré uno a uno los jugadores que han participado en este partido, que son todos y cada uno de ellos, protagonistas de un momento para la historia. Kidiaba, Kususula, Nkulukuta, Kimwaki, Mihayo, Kasongo, Ekanga, Bedi, Kaluyituka, Kabangu, Singuluma y Kanda. Esos son los doce hombres.
El Inter de Porto Alegre estuvo perdido en muchos momentos del juego. Tuvo totalmente la pelota pero sin ningún peligro claro. Parecía dejarse lelvar hasta marcar el gol que les diese el lógico triunfo. Celso Roth sacó tarde a Giuliano, cuando el partido ya andaba en una dinámica fatal para los colorados.
El próximo sábado tendremos al TP Mazembe en la final del Mundial de Clubes, haga lo que haga, todos hemos ganado.
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